Hay barcos de gran tamaño que por lo mismo están equipados con impresionantes instalaciones para ofrecer diversión, entretenimiento y gran atención a bordo. En los barcos pequeños su tamaño no es sinónimo de menor calidad, al contrario, son refinados, exclusivos, lujosos y con una atención personalizada de primera calidad. En cuanto a los tipos de cruceros hay tantos que ni te los imaginas, cada uno esta definido por el perfil de cliente donde se toma en cuenta desde su edad, capacidad económica y hasta su condición sentimental; influyen además para su clasificación el destino, la categoría del barco, sus instalaciones y el precio. Están por ejemplo los cruceros de lujo, los cuales ofrecen un viaje de excepción a sus pasajeros. A bordo, el servicio no tiene nada que envidiar a los palacios terrestres, el personal es muy atento a los pequeños detalles, la cocina es refinada y todas las prestaciones son de alta calidad. Y que decir de sus camarotes, espaciosos y confortables. Algunos barcos de lujo disponen de mini- apartamentos con habitación y salón separados. En un crucero de lujo puedes encontrar servicios extras como el golf, gastronomía o círculos de expertos. En cuanto a los destinos, éstos son los más insólitos, puertos de escala menos conocidos y preservados. Cuentan con veleros capaces de acceder a pequeños paraísos que son inaccesibles para los grandes barcos. Entre la gran variedad se encuentran también los cruceros durante las vacaciones escolares, minicruceros que constan de pocos días de viaje; cruceros familiares, cruceros todo incluido, lo que incluyen excursiones, los posicionales ó de reposicionamiento y por supuesto los pluviales. Fuentes: |